Es así, como comienzo a conocer la geometría de la sombra, creando un simple cubo, con unas placas de papel y alambre galvanizado (al lado izquierdo de la fotografía) puesto a una determinada distancia de una ampolleta, que proyecta rayos de luz, donde el cubo con la ampolleta, forman un angulo de 45°.
Espero lograr una sombra, congruente con la arista del cubo, pero al observar, puedo ver que la sombra proyectada es mas grande de lo que debería ser, ¿Porque sucede?.
Al poner atención, me fijo en que las placas de papel están unas mas arriba que otras, formando ángulos respecto a la ampolleta, mas agudos, lo que explica que, a menor angulo, mayor proyección de la sombra, como también, que mientras más se aleje, el objeto de los 45°, más sera la sombra que se proyecte, ejemplificándolo en el caso de la ultima placa de nuestro cubo. Esto, sumado a la teoría de proyección Cónica y radiante de la luz, son la clara respuesta, a mi pregunta.
Ahora, es cuando la imaginación, debe funcionar. Con un cubo de las mismas dimensiones al anterior, debo ser capaz de generar la misma sombra, pero con una composición de las placas de papel, totalmente distintas a nuestro primer cubo, donde puedo sobrepasar el vértice, pero no mas allá de 6 cm, ocupando dos horizontales y una vertical, o viceversa para poder lograrlo.
Después de jugar un rato con las placas dentro y fuera del cubo, observando sombras, logre concretar el desafió... forme la misma sombra que el primer cubo, a partir de tres placas, una vertical y dos horizontales, donde una de estas ultimas, sobresale del cubo aproximadamente unos 5 cm (al lado derecho de la fotografía).
Es así, como comienzo el camino de mi aprendizaje, arduo y a paso firme, conociendo una fuerza natural, desapercibida por algunos, pero muy necesaria, que hace de nuestra estadía en cualquier lugar, una estadía mas placentera.
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